8 CLAVES PARA UNA DIETA "BAJA EN CARBONO"

Las emisiones de gases de efecto invernadero, responsables del cambio climático, son la suma de millones de aportaciones. En nuestra vida cotidiana podemos marcar una diferencia eligiendo aquellas opciones en alimentación, transporte y uso de la energía en el hogar que conlleven menores emisiones de dióxido de carbono (principal gas de efecto invernadero).

La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), la Red Española de Ciudades por el Clima y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (ahora, MAGRAMA), han elaborado la Calculadora Manual de Carbono 8 Claves para una dieta "baja en carbono", que permite descubrir y rebajar nuestra contribución personal al cambio climático. Esta herramienta educativa, disponible en la página web del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, nos ayuda a calcular cómo nuestras distintas opciones de consumo individual se traducen en Kilogramos de CO2 (por tanto, en emisiones de CO2).

La calculadora facilita información sobre ocho categorías distintas, cada una de las cuales ofrece tres opciones que tienen diferente huella de carbono. Estas categorías son:
-Alimentación – tipo de dieta (x año)
-Alimentación – Distancia y medio de transporte (x kg de alimento)
-Movilidad urbana – medio de transporte (x viajero x 100 km)
-Movilidad interurbana – medio de transporte (x viajero x 100 km)
-Calefacción – temperatura máxima (x hogar y año)
-Higiene personal – opción de aseo (x 200 veces/año)
-Frigorifico congelador – clase energética (x año)
-Lavado de ropa – Programa de lavado (x100 lavados de 5 kg)

Y las claves básicas son:
1- En trayectos cortos, muévete a pie o en bicicleta.
2- Para los desplazamientos más largos, utiliza el autobús y el tren, sobre todo si viajas solo.
3- La calefacción constituye el principal gasto energético doméstico. Regula el termostato: por cada grado menos, ahorras un 7% de energía.
4- Una ducha consume, por término medio, una cuarta parte del agua que un baño. Si además instalas un rociador de bajo consumo, ahorrarás hasta la mitad del agua.
5- El frigorífico es el electrodoméstico que utiliza más energía. Las clases más eficientes (A++ y A+++) están mejor aisladas, lo que reduce sustancialmente su consumo.
6- Calentar el agua supone entre el 80% y 85% del consumo energético de una lavadora. Los actuales detergentes logran muy buenos resultados lavando en frío o baja temperatura.
7- La producción de carne requiere un elevado consumo energético, por eso consumir menos carne es una forma muy efectiva de reducir emisiones.
8- La procedencia y el medio de transporte suponen una parte esencial de las emisiones asociadas a los alimentos. Procura elegir productos locales y de temporada.

En la tienda tenemos una por si quieres echarle un vistazo cuando vengas, y en el Centro de Recursos Mº Ambientales Chico Mendes puedes coger y llevarte alguna.